¿Dueño de una empresa? ¡Capacita a tu equipo de trabajo!

Si has entrado en este artículo es porque, probablemente, o eres dueño de una empresa o lideras un equipo de trabajo, y estás interesado en que las personas a tu cargo crezcan contigo y tu proyecto. Es decir, crezca y se desarrollen tanto personal como profesionalmente.

Estamos en lo cierto ¿no?

Déjame decirte que si es tu caso, estás en el sitio correcto, así que ¡bienvenido/a!

Está comprobado que el 94 % de los trabajadores o colaboradores se esfuerzan y permanecen más tiempo en un espacio de trabajo en el que puedan desarrollar sus capacidades. 

Ya sea que, por ejemplo, las tareas diarias le presupongan un desafío que los haga redescubrirse y mejorar, o que la empresa le brinde cursos y capacitaciones de calidad que aumenten sus habilidades.

Cualquiera sea el caso, como dueño de una empresa deberás ofrecer continuamente oportunidades de desarrollo a tu equipo de trabajo que conlleven aprendizajes y la puesta en práctica de conocimientos actualizados.

¿Dueño de una empresa? ¡Capacita a tu equipo de trabajo!

Ahora bien, veamos qué hacer para lograr el crecimiento y desarrollo de cada colaborador…

¿Qué hacer como dueño de una empresa?

En el caso de que no cuentes con el área de talento humano dentro de la organización, puedes optar por buscar opciones de capacitación en temas puntuales para tus colaboradores.

Y si ya dispones de especialistas en talento humano, asegúrate de que la capacitación de tus colaboradores tengan retorno y se puedan medir con indicadores para tal fin.

Ahora bien, con independencia de la situación, puedes optar en un primer momento por capacitaciones de ventas para empresas, cursos de marketing digital, liderazgo, gestión del tiempo, etc. Todas, apuntando siempre a las áreas neurálgicas claves de la empresa en sus primeras etapas. 

Es claro que la lista de cursos de capacitación puede hacerse “eterna” al barajar las opciones disponibles. Por ello, una evaluación previa de las necesidades de formación es indispensable.

Pero…

Lo que más nos interesa en este punto es explicarte cuáles son los beneficios, tanto para ti como para los empleados y la empresa, de saber abordar la formación de los trabajadores

Y para tal fin, antes quiero que distingas dos cosas:

  • Primero, la capacitación debe enfocarse siempre como una inversión, nunca como un gasto.
  • Segundo, como dueño de una empresa debes asumir el rol de líder, nunca el de jefe.

Así que antes de hablar de los beneficios de la capacitación, toma papel y lápiz -o mejor el móvil o laptop- y garabatea las ideas que te llamen la atención.

1. Capacitación: ¿gasto o inversión?

Lo primero que debes tener en mente es que el dinero que destinarás en la formación está lejos de ser un gasto. 

Sin lugar a dudas, se trata de una inversión que debe terminar ahorrando costes y retornando beneficios o ganancias para la empresa. 

Porque con la formación o capacitación estarás incorporando nuevas herramientas para que tu equipo trabaje de manera más eficiente, lo que redundará en mejores capacidades de respuesta de cara a los clientes, proveedores, socios, etc. 

¡A ver, que tampoco vamos a decirte que de golpe te conviertas en la Madre Teresa de Calcuta!, invirtiendo mucho dinero en los colaboradores y dejando de pensar en el crecimiento de tu empresa. 

Como dueño de una empresa es claro que tu propósito será que la misma logre sus objetivos económicos y sociales, y que permanezca en el camino del éxito.

Por tal motivo, uno de los fines principales del proceso de formación debe ser el de impulsar el desarrollo y la productividad y, por consiguiente, las ganancias y rentabilidad.

En tal sentido, un Training e-commerce para empresas, por ejemplo, puede ser una excelente opción para hacer crecer tu negocio. 

¿Dueño de una empresa? ¡Capacita a tu equipo de trabajo!

2. ¿Qué rol asumir: líder o jefe?

Uno de los primeros errores del dueño de una empresa es situarse en el rol de “jefe” (arriba de una pirámide) y no en el de un “líder” de equipo (lo que implica horizontalidad). 

Apostamos a que ya has escuchado las diferencias entre un rol y otro, pero no podemos dejar de mencionarlas, ya que en este punto, sobre la capacitación, es a nuestro parecer, lo que hará la diferencia. 

Trabajar bajo presión, sin que nadie valore el esfuerzo y solo marquen los errores, es una de las situaciones más desmotivadoras que un trabajador puede vivir. Tal vez, hasta sea la causa número uno de abandono o de una alta tasa de ausentismo y de rotación de personal en la empresa. 

Por eso, si tu cabeza en lo único que piensa es en ganar dinero, dinero y más dinero, te aseguramos que terminarás perdiendo… ¡Eres un jefe! 

En tal caso, te recomiendo cambiar el chip. Porque bajar directrices -desde lo alto de la pirámide- sin mirar lo que está pasando abajo, el estado del personal, su conformidad y comodidad, es impulsar un proyecto a la ruina. 

Estamos de acuerdo, ¿no?

Pues esto es lo que le pasa a un jefe… Es lo que le pasa cuando no cree en las necesidades de crecimiento y desarrollo – personal y profesional – de sus colaboradores.

En términos concretos, el líder está presente, colabora, participa y conoce a su equipo. 

Aplaude y felicita cuando el equipo es merecedor de reconocimiento. Pero, sobre todo, acompaña cuando las cosas no salen como deberían, buscando juntos una solución. Da feedback de calidad.

Así que ten presente esta diferencia entre jefe y líder. 

Beneficios de capacitación y de los cursos de calidad

Brindar la posibilidad a tus empleados de desarrollarse y crecer, apoyados en nuevas herramientas, es un pilar para el crecimiento de la empresa. Al cumplir sus objetivos, el bienestar crece y se afianza el sentimiento de pertenencia y compromiso.

Algunos otros beneficios de la capacitación son los siguientes:

  1. Satisfacción y compromiso. La moral aumenta y el entusiasmo y la camaradería están a la orden del día. Estos espacios de aprendizaje pueden mejorar la inspiración y brindan una sensación de certeza laboral. 

Y, dependiendo del curso elegido, también impulsarán habilidades de comunicación, liderazgo, management y colaboración. 

  1. Actualización de conocimientos y herramientas. Con la velocidad con la que avanza el mundo y las opciones de herramientas disponibles, es indispensable mantenerse al tanto de las nuevas tendencias. Estar a la vanguardia no hará más que mejorar la calidad y excelencia del trabajo. 
  2. Disminución del recambio de equipo. No hay nada más desgastante que un trabajo monótono, estático y que no permita crecer. Muchos empleados inician la búsqueda de un nuevo trabajo y nuevos desafíos, debido a que no vislumbra posibilidad de cambio de status. Y si bien, es imposible impedir que algún empleado se vaya de la empresa en búsqueda de nuevos rumbos, brindando un espacio con posibilidad de crecimiento personal y profesional disminuye considerablemente la situación. 
  3. Activación del sentimiento de pertenencia. Cuando el trabajador siente que su futuro es tenido en cuenta y que es parte importante del todo, se siente más a gusto. Tendrá más compromiso. 
  4. Adaptación e innovación como habilidad principal. Aprender y estudiar abre la mente. Con lo que el equipo puede plantear nuevas ideas frente a distintas situaciones. Por supuesto, esto viene acompañado por la disminución de errores, ya que tienen más habilidades para completar de forma óptima sus tareas. 
¿Dueño de una empresa? ¡Capacita a tu equipo de trabajo!

Comentarios para cerrar

Antes de despedirme quiero hacer hincapié en dos beneficios adicionales que considero claves para todo dueño de una empresa.

En primer lugar, con una capacitación continua no será necesario estar revisando el trabajo de los colaboradores. 

En la medida en que el equipo esté más capacitado, su trabajo mejorará y terminará generando confianza en la calidad de las tareas. Esto significa que se reducirá el tiempo de revisión y control por parte del supervisor, quien podrá destinar su tiempo a tareas importantes y urgentes. 

Y en segundo lugar, habrá más y mejor trabajo en equipo. El personal sabrá que todos cuentan con habilidades y capacidad que pueden mejorar el trabajo diario. Esto fomentará, con el tiempo, un mejor clima laboral y la organización interna irá cada vez en un mejor rumbo. 

En fin, con esta corta lectura ya tienes elementos para considerar la capacitación como una inversión esencial. Una vez iniciado el proceso, será cuestión de tiempo para que comiences a ver los cambios. Y, en ese momento, recordarás este artículo básico dirigido a dueños de empresas.

¡Muchas gracias por seguirme!

Autor
David Polo Moya
David Polo Moya

Nacido en Madrid, de 46 años. Licenciado en Business por la Universidad de Portsmouth (Reino Unido) MBA por el Instituto de Empresa en Madrid (España) e Indian Instute of Management en Calcuta (India). Emprendedor recurrente, David Polo es el fundador de Time Management, consultora de sistemas de gestión con más de 12 años de experiencia y por otro lado los blogs emprender-facil.com y gestionar-facil.com. Consultor independiente de emprendedores y empresas, en análisis, gestión y medición de datos, David Polo Moya se enfoca en el desarrollo empresarial a través del uso de Plataformas de gestión, consultoría estrategia y de innovación y ayuda a emprendedores y empresarios. Creador de metodologías como Matriz estrella y experto en Jobs to be done y metodología Raíles. Visita mi perfil en about.me: https://about.me/davidpolomoya


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