¿Cómo se calcula el Ratio de Tesorería o “prueba ácida”?

Dentro de la serie de indicadores financieros, hoy dedicaremos este post a explicar los detalles del ratio de tesorería, también conocido como “prueba ácida”.

¡Presta atención!

Es un ratio clave para toda empresa, pues considera las cuentas líquidas de las que se dispone para cumplir con las obligaciones más próximas.

Saber calcular, interpretar y hacer seguimiento al ratio de tesorería es de suma importancia.

Ya que, ayuda a diagnosticar la capacidad que tiene una compañía para honrar sus pagos más inmediatos.

¿Lo comprendes?

Entonces, si quieres saber más del tema, no te pierdas el siguiente contenido:

  • Primero, aprenderás qué es el ratio de tesorería o prueba ácida en una empresa.
  • Después, te contaré cómo se calcula el ratio de tesorería.
  • También te daré ejemplos sobre la interpretación y los valores óptimos para el indicador.
  • Por último, te mostraré la relación con otros indicadores o ratios financieros.

Lo primero que debes tener presente es que todos los indicadores financieros dan cuenta de la “salud” de la empresa, por tanto, no se pueden descuidar.

Y, para que comprendas muy bien de qué se trata el ratio de tesorería, iniciaremos con una definición sencilla y clara.

¿Te parece?

¡Acompáñame!

¿Qué es el ratio de tesorería o “prueba ácida” en una empresa?

El ratio de tesorería es una relación porcentual de dos variables:

  • Primero, las cuentas de dinero disponible (efectivo, depósitos a la vista en bancos, etc.), más, los bienes que en un futuro cercano pasarán a engrosar la disponibilidad (efectos por cobrar, inversiones a corto plazo o ajustes).
  • Segundo, las deudas contraídas, cuyo plazo venza en un periodo de tiempo menor de un año (pasivo corriente).

En este contexto, ambas variables se relacionan para saber qué porcentaje representa una sobre la otra.

Así, el ratio de tesorería -o “prueba ácida”, como también se le conoce- refleja la solvencia del día a día de la empresa, sin tomar en cuenta las existencias, cuya convertibilidad puede ser incierta.

La “prueba ácida” solo considera el dinero que se tiene a la mano.

¡Así de simple!

Es un ratio que tiene mucha relación con la liquidez, pero va un paso más allá por su cualidad de inmediatez.

La importancia del ratio de tesorería radica en que permite comprender la capacidad de pago inmediata de la empresa, a través de un número.

Ahora te preguntarás…

¿Cómo se calcula el ratio de tesorería?

La fórmula a aplicar para calcular este indicador es la siguiente: 

Ratio de Tesorería =  (Disponible + Realizable) / Pasivo Corriente.

Te explico que significa esto:

  • Disponible

Hace referencia a la suma de todo lo que sea dinero líquido.

Comprende, por ejemplo: los billetes y monedas, depósitos a la vista en bancos, fondos de tránsito, cuentas por cobrar, saldo disponible en tarjetas de débito y crédito, remesas en tránsito y los fondos especiales.

En la contabilidad, el disponible corresponde a un elemento del Estado de Situación o Balance General, específicamente, al Activo Corriente o Circulante.

  • Realizable

Comprende aquellos bienes que se convierten en dinero líquido de manera rápida.

Son los valores diferidos que pueden pasar a ser “disponibles” a muy corto plazo.

En la contabilidad, el realizable se ubica también en el Estado de Situación Financiera y corresponde al Activo Corriente, dentro del rubro de los Exigibles.

  • Pasivo Corriente

Son todas las deudas y obligaciones a corto plazo de una empresa, es decir, que las deba pagar en un período menor a un año.

Por lo general, son los compromisos contraídos para financiarse, por ejemplo, las cuentas y efectos por pagar a proveedores.

Otro aspecto que puede ayudarte a comprender la ecuación es que el valor: (Disponible + Realizable), puede sustituirse por: (Activo Corriente – Inventario).

Es claro que la fuente de los datos para este cálculo se obtiene del balance general o balance de situación de la empresa. 

Rangos de interpretación del ratio de tesorería

La interpretación de cualquier indicador siempre se verá influenciada por la naturaleza y el contexto de cada empresa.

No obstante, la interpretación general del resultado que arroje la fórmula del ratio de tesorería, se puede resumir en las siguientes expresiones:

Ratio de tesorería menor que 1

Significa que sus deudas de corto plazo son mayores que el dinero con el que cuenta en lo inmediato, por tanto, la empresa puede correr el riesgo de incurrir en mora o incumplimiento de pago. En este caso, es necesario tomar medidas estratégicas cuanto antes.

Ratio de tesorería igual a 1

Se interpreta que la empresa está en un margen equilibrado, donde cuenta con el dinero justo para cumplir sus compromisos de corto plazo.

Ratio de tesorería mayor que 1

En este caso, los activos empresariales disponibles y realizables en el corto plazo, son mayores que las obligaciones más inmediatas. Así, la empresa cuenta con la liquidez necesaria para honrar sus deudas sin problema.

Ratio de tesorería muy superior a 1

Podría darse el caso, que resultado del ratio de tesorería se sitúe en niveles muy superiores a 1.

Por ejemplo, un resultado de 2,0 supone que la empresa podría pagar 2 veces sus deudas en este momento. 

Pero, ¿sería un resultado “bueno o malo”?

Realmente, esto debe llamar la atención, ya que, significa que existe un exceso de activos líquidos estancados u ociosos.

Situación que, aunque cause tranquilidad al momento de cumplir con los compromisos, no es favorable para la rentabilidad de la empresa.

En otras palabras…

La interpretación que le podemos dar al ratio de tesorería o “prueba ácida” es que, por cada unidad monetaria (euro, dólar, peso, sol, etc.) que se debe en el corto plazo, la empresa está en la capacidad de pagar de inmediato un tanto %, porque es el dinero que se tiene “a la mano”.

Ahora bien, te reitero que para hacer una interpretación acertada del ratio de tesorería, es preciso observar la naturaleza de la compañía.

Pues, no es lo mismo la situación de una empresa mercantil, cuyas deudas a proveedores tienen una rotación muy dinámica, que una empresa de servicios profesionales, cuyos acreedores pudieran ser muy pocos.

Fíjate, que en cada caso la necesidad de la disponibilidad de pago en el corto plazo es diferente.

En la primera empresa, esta situación determina las ventas, mientras que en la segunda, solo se trataría de pagar algún tipo de financiamiento.

El ratio de tesorería es un referente financiero importante, por lo cual el valor óptimo dependerá de cada situación en particular.

¿Cómo mantener un ratio de tesorería favorable?
¿Cómo mantener un ratio de tesorería favorable?

Relación con otros indicadores o ratios financieros

El ratio de tesorería no es el único indicador que aplica cuando queremos determinar la liquidez de una empresa.

Sin embargo, es el que proporciona la información más precisa sobre la inmediatez de la disponibilidad de recursos.

Eso ya está claro, ¿verdad?

Siendo así, debo decirte que también existen otros ratios, como el de disponibilidad, el ratio de liquidez y otros indicadores financieros.

Entonces, lo importante es saber que cada uno por separado, o todos en conjunto, te ayudan en el análisis de la situación con respecto a las condiciones con las que se cobra y se paga en la empresa.

Estos tópicos son fundamentales para mantener la “salud financiera” en términos de tesorería, permitiendo el control interno y facilitando la toma de decisiones, en procura de una mejora continua.

 Así mismo, propende la comparación con otras empresas del sector, estableciendo puntos de referencia.

Para ampliar este punto, te recomiendo que dediques unos minutos al artículo: ¿Cuáles son los 6 ratios financieros claves en pymes? Dónde te explico con detalle cada indicador.

Conclusión

Según pudiste apreciar a lo largo de la lectura…

El ratio de tesorería o la “prueba ácida” es clave para cualquier empresa, ya que, proporciona información sobre la disponibilidad de dinero líquido para cumplir con las deudas más inmediatas.  

Por tanto, si no vigilas el comportamiento del ratio de tesorería en el tiempo, estarás caminando “a ciegas”.

Pues, no podrás saber si la empresa está tomando las medidas acertadas para gestionar sus recursos más líquidos y así, cumplir con sus compromisos de pago en el corto plazo.

Pero, ¡no te preocupes!

Con lo que aprendiste hoy podrás hacer el cálculo aplicando correctamente la fórmula y haciendo el seguimiento adecuado, según los parámetros que te enseñé.

En este sentido, te recomiendo llevar un modelo de análisis del indicador, que te ayude a generar alertas sobre la marcha y mantener el foco.

Para ello, puedes usar cualquier programa como Excel, Google Sheets o nuestra versión gratuita de gestión Platzilla.

Gracias por leernos.

Autor
David Polo Moya
David Polo Moya

Nacido en Madrid, de 46 años. Licenciado en Business por la Universidad de Portsmouth (Reino Unido) MBA por el Instituto de Empresa en Madrid (España) e Indian Instute of Management en Calcuta (India). Emprendedor recurrente, David Polo es el fundador de Time Management, consultora de sistemas de gestión con más de 12 años de experiencia y por otro lado los blogs emprender-facil.com y gestionar-facil.com. Consultor independiente de emprendedores y empresas, en análisis, gestión y medición de datos, David Polo Moya se enfoca en el desarrollo empresarial a través del uso de Plataformas de gestión, consultoría estrategia y de innovación y ayuda a emprendedores y empresarios. Creador de metodologías como Matriz estrella y experto en Jobs to be done y metodología Raíles. Visita mi perfil en about.me: https://about.me/davidpolomoya


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